La Fiscalía de Oaxaca investiga la posible participación de un grupo criminal y una disputa familiar por un inmueble en el homicidio ocurrido el 6 de noviembre en San Juan Cacahuatepec
latinus.us
EFE.- La fiscalía de Oaxaca anunció este viernes que trabaja en dos líneas de investigación sobre el asesinato de la funcionaria municipal de San Juan Cacahuatepec, Guadalupe Urban, una de ellas apunta a una disputa familiar.
En un comunicado, el Ministerio Público señaló que el crimen podría estar relacionado con la incursión en la zona de una célula delictiva que opera en los límites de Oaxaca.
Asimismo, la FGEO analiza una “disputa por propiedades inmuebles que mantenía la familia de la víctima” como posible móvil del ataque.
El crimen se perpetró el jueves por la mañana cuando Guadalupe Urban recibió los disparos de un arma de fuego mientras salía de su domicilio.
El cuerpo se encontró sobre el camino que conduce a la comunidad vecina de San Antonio Ocotlán, Cacahuatepec, según informó la Fiscalía estatal.
La institución confirmó que “los indicios revelan que se trató de una agresión con arma de fuego perpetrada desde una motocicleta”, de acuerdo con los peritajes preliminares.
De esta manera, continúan los trabajos de investigación para esclarecer las causas que motivaron a los responsables a acabar con la vida de la funcionaria municipal de San Juan Cacahuatepec.
La funcionaria se desempeñaba como representante ciudadana del área de Parques y Jardines del ayuntamiento, cargo que ocupaba en el actual periodo municipal 2025-2027.
Este asesinato se une al de Israel Ramírez Peralta, agente municipal de Santa Catarina Juquila, en la comunidad de San Marcos Zacatepec, también en Oaxaca, ocurrido cuatro días antes.
Además, tras el asesinato de Carlos Manzo, alcalde municipal de Uruapan, Michoacán, después de un evento público del Día de Muertos el pasado 1 de noviembre, el cual ha generado una fuerte indignación en el país, donde se han registrado protestas y enfrentamientos de los manifestantes con las fuerzas policiales.
De acuerdo con registros y reportes estatales, desde el 1 de octubre, cuando Claudia Sheinbaum asumió la presidencia de México y hasta el 3 de noviembre, al menos 10 alcaldes o presidentes municipales han sido asesinados.
