El cortejo circulaba rumbo a la catedral de St. Giles de Edimburgo cuando se oyeron los gritos contra el duque de York, acusado de abuso sexual a una menor
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El príncipe Andrew fue insultado por un manifestante este lunes mientras seguía el ataúd de la reina Isabel II a través de Edimburgo. El hijo preferido de la monarca fue visto en traje después de que se le prohibiera usar su uniforme militar.
En las imágenes se puede escuchar a un joven gritando “Andrew, eres un viejo enfermo” cuando el duque de York, de 62 años, pasó detrás del coche fúnebre de su madre antes de que un espectador y un policía tiraran al manifestante al suelo.
Se produjo una breve pelea, antes de que el oficial se lo llevara mientras gritaba “repugnante” y “no he hecho nada malo”, mientras que en el fondo la gente gritaba “Dios salve al rey”.
Andrew fue retirado de la vida pública en medio de las consecuencias de su papel en el escándalo de Jeffrey Epstein. No se le permitió usar ropa militar para la ocasión de hoy y en su lugar usó un traje negro.
El príncipe tendrá que aparecer vestido de civil en todos los demás eventos públicos para llorar a su madre, aunque, según informó la prensa inglesa, se hará una excepción como muestra especial de respeto por la reina Isabel en la vigilia final en Westminster Hall.
El rey Carlos, la princesa Ana, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo siguen el coche fúnebre que lleva el ataúd de la reina Isabel de Gran Bretaña en Edimburgo, Escocia, Gran Bretaña, el 12 de septiembre de 2022 (Reuters)Sin embargo, el amigo y periodista preferido de Meghan Markle, Omid Scobie, afirmó que al príncipe Harry, quien también ha visto acción militar al servir dos giras en Afganistán, se le ha prohibido usar su uniforme.
“Entiendo que, a diferencia del príncipe Andrew, al príncipe Harry no se le permitirá usar uniforme en la vigilia final en Westminster Hall. Sin duda, un duro golpe para el duque de Sussex,”, tuiteó esta tarde.
El ataúd de la reina Isabel, cuando el coche fúnebre llega a la Catedral de St. Giles, en Edimburgo, Escocia, Gran Bretaña, el 12 de septiembre de 2022 (Reuters)Andrew renunció a su estatus de Su Alteza Real y fue despojado de todos sus roles militares honorarios por su amistad con Epstein y las acusaciones hechas por Virginia Roberts. Una denuncia que terminó en una demanda en los Estados Unidos y un acuerdo extrajudicial multimillonario. El duque de York siempre ha negado las acusaciones.
Harry y Meghan también fueron despojados de sus títulos después de que renunciaron a sus deberes reales y se fueron del Reino Unido a California.
Britain’s King Charles, Princess Anne, Prince Andrew and Prince Edward follow the hearse carrying the coffin of Britain’s Queen Elizabeth, on the Royal Mile, in Edinburgh, Scotland, Britain September 12, 2022. REUTERS/Carl RecineEste lunes, Andrew caminó con sus hermanos mientras transportaban a Su Majestad desde el Palacio de Holyroodhouse, después de un viaje de seis horas desde el Castillo de Balmoral. El ataúd de la reina se cubrió con el estandarte real de Escocia y se vistió con una corona de flores.
El coche fúnebre estaba flanqueado por un grupo del Regimiento Real de Escocia y la Guardia del Cuerpo del Rey de Escocia. La policía montada con traje ceremonial cabalgó al frente de la procesación.
El rey Carlos III caminó solemnemente al paso de sus hermanos detrás de su amada madre. Los simpatizantes reunidos se quedaron en silencio cuando apareció el coche fúnebre.
El rey Carlos III, el príncipe Andrés, duque de York y la princesa Ana, participan en la procesión del ataúd de la reina Isabel II mientras se dirige a la catedral de St Giles, después de recorrer la Royal Mile el 12 de septiembre de 2022 en Edimburgo, Escocia (Reuters)Luego, la multitud estalló en aplausos espontáneos cuando el cortejo se acercó y muchos gritaron “Dios salve al rey y Dios salve a la reina”.
Después del servicio, los miembros del público podrán desfilar para presentar sus respetos durante 24 horas antes de que Su Majestad sea trasladada a Londres en avión.
Anteriormente, Carlos saludó al público en las calles de Edimburgo en una caminata no planificada mientras la capital de Escocia daba la bienvenida al nuevo monarca y lloraba a la reina Isabel II.
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