Por Adrián De los Santos
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Ante el paso del huracán Willa por el océano Pacífico, las zonas más afectadas fueron las del sur de la región, una de ellas Boca de Tomatlán, donde la creciente del río los Horcones ocasionó que se desbordara y que afectara algunas viviendas, tanto de los municipios de Puerto Vallarta como de Cabo Corrientes. Y es que en ese lugar se dividen ambos municipios.
Pese al previó aviso de las autoridades para que las embarcaciones que estaban sobre la desembocada de dicho río fueran retiradas, los habitantes trabajaron desde un día antes para que las embarcaciones que estuvieran en riesgo de ser arrastradas por la corriente, fueran llevadas a un lugar seguro, sin embargo, aún así algunas estuvieron a punto de ser arrastradas mar adentro.
Unidades de Protección Civil y Bomberos de Puerto Vallarta y personal de Obras Públicas acudieron a bordo de varias unidades y con maquinaria pesada, para de esa manera abrir algunos accesos para llegar por diferentes puntos al cauce del río y ayudar con las maniobras para rescatar algunas de las embarcaciones que se estaban viendo afectadas.
Oficiales recorrieron gran parte de dicha localidad y evaluaron las zonas de riesgo, sin que hasta el momento se tenga conocimiento si se realizaron algunas evacuaciones, pues hasta la noche de este martes la información no fluía en su totalidad, sabiéndose que seguían con el monitoreo de dicho río.
De momento lo que sí se confirma, es que hubo inundaciones en algunas viviendas, entre ellas la del agente municipal, Sergio Robles Ortega, quien esta noche ya era ayudado por las autoridades para el saneamiento de su finca y la de los demás afectados.
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