CIUDAD DE MÉXICO (apro).— La irlandesa Marie Collins, integrante del equipo creado por el Papa Francisco para combatir la pederastia sacerdotal, renunció a su cargo debido a la “falta de colaboración” de la curia romana para luchar contra este flagelo de la Iglesia católica.
A través de un comunicado, la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores anunció hoy miércoles la renuncia de Collins, la cual representa un duro revés a la política papal de “tolerancia cero” a la pedofilia eclesiástica.
El comunicado agrega que Collins había venido denunciando “la resistencia de algunos miembros de la curia romana” a aplicar estas políticas del pontífice.
Y refiriéndose a la Congregación para la Doctrina de la Fe, encargada de analizar los casos de pederastia, Collins lamentaba que “la falta de colaboración ha sido penosa”.
Víctima ella misma de la pederastia sacerdotal, Collins no es la primera integrante de este equipo papal que renuncia a su cargo, pues el año pasado también lo hizo el inglés Peter Saunders, otra víctima de abuso sexual quien dijo sentirse traicionado por una jerarquía eclesiástica que “no hace nada” contra estos atropellos de sus sacerdotes.
De esta manera, ya son dos los integrantes de este equipo para combatir la pedofilia que presentan sus renuncias por el mismo motivo; la falta de cooperación de la burocracia central del Vaticano.
Conformado por laicos y religiosos, este equipo fue creado por Bergoglio en 2014, con la finalidad de proponer “iniciativas oportunas” para combatir los abusos sexuales contra menores cometidos por sacerdotes.
Considerada una de las figuras centrales de esta reforma del Papa, Collins continuará, sin embargo, trabajando en dar atención a víctimas y capacitación a los obispos en esta materia, según informó el Vaticano.