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CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una petición puntual suscrita por 52 mil ciudadanos de distintos puntos del país llegó hoy a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN): que el máximo tribunal ejerza su facultad de atracción para revisar la sentencia dictada en el caso de “Los Porkys”.
En la petición que se lanzó a través de la página Change.org, los peticionarios recuerdan que en marzo último el juez Anuar González Hemadi concedió un amparo a Diego Cruz Alonso, uno de los tres jóvenes acusado de violar a una menor de edad Daphne Fernández, al considerar que no observó una intención lasciva ni que el acusado tuviera la intención de copular, a pesar de que el imputado le tocó los senos a la víctima e introdujo los dedos en su vagina.
Los solicitantes consideran dada la dimensión del asunto la Corte debería atraer el asunto porque no confían en el Tribunal Colegiado de Circuito, con sede en el estado de Veracruz, que revisará la sentencia del juez de primera instancia.
Pablo Reyes, promotor de la petición, dice que el caso “ha estado lleno de influyentismo, corrupción e impunidad, donde servidores públicos corruptos han apoyado a las familias de los ‘Porkys’ por su fuerte poder económico, para que los tipejos libren el castigo: algunos huyeron y fueron extraditados, otros siguen evadidos de la justicia”.
A su juicio, “la Corte debe ser sensible a esta exigencia social y debe aceptar favorablemente la petición”.
La abogada de Reyes, Vanessa Sánchez Hernández, opinó que si bien la ley no permite a cualquier ciudadano solicitar a la Corte ejerza la facultad de atracción, lo cierto es que en este caso concreto existen elementos suficientes para que las ministras y ministros hagan suya la petición.
“La afectación grave a derechos de víctimas, a derechos de menores de edad, a derechos de mujeres y el absurdo argumento del Juez de Distrito de Veracruz de que no hubo intención lasciva en la violación a la víctima, dan méritos jurídicos sobrados”, dijo la litigante.
Con el hashtag #SCJNvsJuezPorky, Reyes invita a más gente a unirse a la conversación y mantener la presión social a la Suprema Corte en redes sociales.