Esta alianza tripartita se impondrá a la bancada de MC que obtuvo el año pasado ocho escaños en urnas y que, en estas semanas por invitación del gobernador, ha sumado tres posiciones más, para sumar 11.
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MONTERREY, N. L., (apro).- Los partidos mayoritarios PAN y PRI, junto al PT, armaron un bloque en el Congreso de Nuevo León para sacar adelante su propia agenda y responder al gobernador de Movimiento Ciudadano, Samuel García, que desde la semana pasada ha atraído legisladores y alcaldes a su partido.
Con esta unión los auriazules aportan 14 votos, por 13 de los tricolores y uno petista, lo que suma 28, suficientes para obtener la necesaria mayoría calificada de 24, equivalente a dos terceras partes de la legislatura, para consumar enmiendas constitucionales.
Esta alianza tripartita se impondrá a la bancada de MC que obtuvo el año pasado ocho escaños en urnas y que, en estas semanas por invitación del gobernador, ha sumado tres posiciones más, para sumar 11. La más reciente incorporación a la fracción de Movimiento Ciudadano es el priista Héctor García, dirigente de los burócratas municipales de Guadalupe, quien anunció que hoy dejaba la dirigencia municipal de la CNOP.
Completan los 42 asientos en el Congreso dos diputados de Morena y uno más del Verde.
En los próximos días la bancada naranja puede sumar otro miembro, debido a que el morenista Waldo Fernández posiblemente acepte un puesto que le ofrecieron en el Gobierno Federal, con lo que le dejaría el puesto a su suplente, José Alfredo Pérez, exdirigente estatal del PAN quien, el pasado fin de semana, anunció su adhesión a Movimiento Ciudadano, convocado por Samuel García.
Al anunciar la alianza que denominaron Acuerdo de civilidad política, PRI, PAN y PT, los legisladores señalaron que buscan que Nuevo León “cuente con un Poder Legislativo a la altura de sus ciudadanos, respondiendo al sólo interés de las y los nuevoleoneses”.
El acuerdo fue suscrito por la petista Anylú Bendición Hernández Sepúlveda, y los coordinadores panistas Carlos Alberto de la Fuentes Flores, y priista Heriberto Treviño Cantú, quienes manifestaron que proceden para dar a la ciudadanía “la certeza de que su voluntad será respaldada por cada uno de las diputados y diputados que forman parte de las fuerzas políticas que ellos representan”.
La alianza firmó un decálogo con acciones que regirán su trabajo: seguridad para todas y todos; transparencia en los recursos públicos; movilidad; derecho al Agua; reactivación Económica; educación de calidad; infraestructura educativa; salud digna para todas y todos; medio ambiente sostenible; y agilidad en trámites y servicios.
El acuerdo surge cuando el gobernador emecista se ha pronunciado en contra de una iniciativa impulsada por los legisladores locales que busca independizar del Gobierno, la Unidad de Inteligencia Financiera del Estado (UIFE) y el SAT local.