A pesar de los esfuerzos de las autoridades locales, la falta de conciencia sobre los riesgos sanitarios continúa en Puerto Vallarta, donde las llantas abandonadas en lotes baldíos siguen siendo un caldo de cultivo para el mosquito transmisor del dengue, especialmente en temporada de lluvias
Llantas tiradas en lotes baldíos de Fluvial Vallarta, favorecen propagación de dengue.
En diversos puntos de Puerto Vallarta, principalmente en los lotes baldíos del fraccionamiento Fluvial Vallarta, continúan siendo un refugio para llantas viejas que, al acumular agua de lluvia.
Estos se convierten en focos de reproducción para el mosquito Aedes aegypti, principal transmisor del dengue.
A pesar de las campañas de concientización por parte de las autoridades, muchos habitantes de la ciudad siguen mostrando indiferencia ante este problema ambiental y de salud pública, sin tomar medidas para evitar el almacenamiento ilegal de estos objetos.
La acumulación de llantas no solo deteriora la imagen urbana, sino que agrava la situación sanitaria en plena temporada de lluvias, cuando el riesgo de enfermedades como el dengue aumenta considerablemente.
Las autoridades han reiterado que es fundamental evitar el abandono de llantas en espacios públicos y promover su disposición adecuada en puntos de reciclaje, sin embargo, la apatía prevalece.
Esto pone en peligro tanto a los residentes como a los turistas, quienes pueden estar expuestos a un brote de dengue si no se actúa con responsabilidad para erradicar los criaderos de mosquitos en la ciudad. El llamado es a que los vallartenses se sumen al esfuerzo colectivo de mantener la ciudad limpia y libre de estos focos de infección.
