Los agentes de la Policía Turística lo invitaron a retirarse del lugar, ya que corría peligro. Al parecer, andaba bajo los efectos del alcohol y el cocodrilo, tras disfrutar el “privado” que le hicieron, se metió al río
Elementos de la policía turística retiraron a una persona del sexo masculino el cual, al parecer, bajo los efectos del alcohol, bailaba cerca de donde se encontraba un cocodrilo, esto en la desembocadura del río Cuale con el mar.
El hombre se acercó a una distancia considerable a un cocodrilo de aproximadamente dos metros y medio de largo y comenzó a bailarle, situación que fue reportada por los ciudadanos, quienes observaban como el sujeto se arriesgaba a aventarse un baile sexi, a un costado de este enorme cocodrilo.
Fue el personal de la policía turística quien al llegar, encontró al masculino en la zona de playa en la desembocadura con río Cuale, invitándolo a retirarse del lugar o al menos alejarse del río, toda vez que alcanzaron a observar que el cocodrilo se metió nuevamente al agua, siendo enterado el personal de Ecología para realizar las maniobras correspondientes.
Personal de esta dependencia del área de Fauna Silvestre, ha recomendado no molestar a los cocodrilos y lejos de esto, mejor reportarlos a los números de emergencia para que sea el personal especializado el que se encarguen de capturarlos y cambiarlos de su hábitat a otro sitio, donde no sean molestados ni puedan ser ellos un riesgo para la ciudadanía.
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