Al menos tres detalles sobre el caso abren la hipótesis de una posible relación del presunto feminicida con redes criminales
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El feminicidio de Karla Bañuelos, ocurrido la madrugada del 12 de julio de 2025 en Guadalajara, ha generado conmoción no solo por la violencia extrema con la que fue perpetrado, sino también por los indicios que apuntan a una posible conexión entre el agresor y redes del crimen organizado.
De acuerdo con el analista en seguridad David Saucedo, el uso de un fusil de asalto, la pericia del agresor al manipularlo, sumado a los señalamientos de vecinos, podrían revelar una conexión directa entre el presunto feminicida, identificado como Kevin “N”, y algún grupo criminal.
El ataque quedó registrado por una cámara de videovigilancia y muestra el momento en que el agresor desciende de una camioneta Chevrolet Equinox blanca, vestido con sudadera azul y tenis blancos, y tras un intercambio verbal con Karla, saca de la parte trasera del vehículo lo que parece ser un fusil tipo AR-15.
Primero lanza dos disparos intimidatorios al suelo y, segundos después, el sujeto acciona el arma directamente contra la cabeza de la joven madre de 28 años, provocando su muerte inmediata. Todo ocurrió frente a su hija de 12 años, quien presenció el asesinato y, según familiares, se encuentra en estado de shock.
“Disparó como alguien entrenado”
Una mujer de 28 años fue asesinada a tiros en Balcones de Oblatos, Guadalajara. Según las primeras indagatorias, el agresor discutió con ella antes de dispararle. (X/@Libro_negro_)
En entrevista con Aristegui Noticias, el consultor en seguridad David Saucedo subrayó que el comportamiento del agresor y la forma en que utilizó el arma apuntan a una persona habituada al uso de este tipo de armas.
“Colocó el fusil en modo automático, de modo que tan solo con apretar el gatillo se lanzaron ráfagas […] conoce bien el manejo del arma. Le cambia del modo semiautomático al modo automático y descarga una ráfaga en contra de una persona indefensa”, afirmó.
Este nivel de conocimiento técnico no es común en civiles. De hecho, Saucedo explicó que este tipo de armas son de uso exclusivo del Ejército, y su comercialización en México está restringida a la Secretaría de la Defensa Nacional. “Lo que implica que esta arma forzosamente entró bajo los esquemas de tráfico de armas”, señaló.
Aunque aclaró que aún es prematuro afirmarlo de forma definitiva, el especialista indicó que tanto por el tipo de arma como por la forma en que se ejecutó el asesinato, es muy probable que se trate de alguien vinculado a actividades criminales de alto nivel.
Huida sin rastro: otra señal preocupante
Tras cometer el crimen, el presunto feminicida huyó en la camioneta en la que había llegado. El vehículo fue localizado horas más tarde en la colonia Hacienda Santa Fe, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga, a más de una hora del lugar del crimen.
Este desplazamiento encendió otra alarma: el trayecto no fue detectado por ninguna cámara oficial de videovigilancia, según relataron familiares a medios locales.
Sebastián Mier, reportero que ha dado seguimiento al caso, apuntó en entrevista con Jaime Núñez que esta ausencia de rastreo resulta “muy extraña”, considerando que se trató de un trayecto largo dentro de la zona metropolitana de Guadalajara y que el vehículo incluso tenía placas visibles. “No hubo una sola cámara oficial que lo siguiera”, dijo. A ello se suma que la cámara que captó el crimen no era parte del sistema estatal, sino una cámara particular.
Vecinos en silencio y miedo en la colonia
El asesinato ocurrió frente al domicilio de Karla, en la colonia Balcones de Oblatos. Tras el crimen, algunos vecinos y familiares intentaron auxiliarla, mientras otros gritaban desesperadamente su nombre. Sin embargo, en los días posteriores, medios locales han reportado que la mayoría de los vecinos han optado por no hablar públicamente sobre lo ocurrido, por miedo a represalias.
De acuerdo con testimonios recogidos por El Heraldo de México, varios habitantes de la zona señalaron que Kevin “N” era una persona peligrosa. “Es una lacra”, dijeron algunos de los vecinos, quienes también aseguraron que su familia estaría involucrada en actividades criminales.
La Fiscalía del Estado de Jalisco confirmó que Kevin “N” ya fue identificado y que hay una orden de aprehensión girada en su contra. Sin embargo, hasta el momento de esta publicación, el sujeto continúa prófugo.
Salvador González de los Santos, fiscal estatal, dijo que se desconoce si el agresor pertenece a algún grupo criminal, pero reconoció que “no es común” que alguien tenga acceso y utilice un arma de ese tipo.
No era su pareja; acusan revictimización
En un primer momento, se difundió en redes sociales que el atacante era la expareja sentimental de Karla. Esta versión fue desmentida públicamente por el padre de la víctima, Rafael, quien declaró en entrevista con Telediario: “Que yo sepa, nunca fue su pareja”.
Amigos entrevistados por medios locales han sostenido que Kevin “N” acosaba a Karla y buscaba establecer un vínculo sentimental, pero ella se negaba debido a que sabía que era una persona peligrosa.
Además del dolor por su pérdida, la familia de Karla Bañuelos ha tenido que enfrentar la revictimización de su memoria en redes sociales. Usuarios han difundido mensajes culpabilizándola por haber enfrentado al agresor e incluso justificando la violencia debido a que golpeó la camioneta antes del ataque.
Colectivos feministas, como Sororas Violetas Jalisco, han salido en su defensa, recordando que Karla actuó en legítima defensa y exigieron que cesen los comentarios que culpan a la víctima y desvían la atención del verdadero responsable.
Uno de los aspectos más dolorosos del caso es la orfandad en la que quedó la hija de Karla, una menor de tan solo 12 años que presenció el asesinato de su madre.
