En México, la Secretaría de Obras y Servicios de la CDMX es un canal para informar sobre ascensores descompuestos
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En el mundo de las probabilidades, en el escenario de una caída dentro de un ascensor, es necesario seguir un protocolo o tener una idea para maximizar las posibilidades de supervivencia. Si bien la ocurrencia de tal evento es extremadamente baja, es esencial tener conocimiento de las medidas de seguridad recomendadas.
En primer lugar, ante una caída inesperada, la posición de decúbito supino en el suelo del ascensor es la estrategia más efectiva. La acción de cubrir la cara busca reducir posibles impactos de escombros durante la caída.
El fundamento detrás de esta recomendación se encuentra en la distribución más uniforme de la fuerza del impacto al tocar tierra, incluso considerando la presencia ocasional de muelles en la planta baja, destinados únicamente al soporte durante tareas de mantenimiento.
Es fundamental comprender que la ejecución de esta medida no es trivial debido a la pérdida de la sensación de peso durante la caída. Evitar rebotar implica la necesidad de encontrar una manera de tirar hacia abajo y mantenerse adherido al suelo del elevador.
Impacto súbito sin control
En el caso de encontrarse en una caída, es vital descartar acciones que podrían parecer intuitivas pero resultan peligrosas. Saltar con la intención de agarrarse al piso mientras la cabina cae, arrodillarse, ponerse en cuclillas o apoyarse en las paredes de la cabina son opciones que aumentan considerablemente el riesgo de lesiones.
La opción más segura en caso de caída de la cabina es adoptar la posición de decúbito supino, distribuyendo el peso del cuerpo de manera equitativa para evitar que una parte específica soporte una carga desproporcionada.
Cubrirse la cara con las manos es una medida adicional para protegerse de posibles escombros. La posición boca abajo se desaconseja, ya que en esta postura, las costillas serían las principales afectadas por el impacto.
Si el espacio es limitado y no permite acostarse, sentarse y doblar las rodillas hacia el pecho es una alternativa que contribuye a reducir el riesgo de lesiones durante la caída.
Medidas de atención en México
En México, la Secretaría de Obras y Servicios de la CDMX ofrece un canal para informar sobre ascensores descompuestos. La Lic. Sandra Santiago Rivera, responsable de Atención Ciudadana, está disponible a través del correo electrónico websobse@gmail.com.
Las oficinas de atención se ubican en Avenida Universidad #800 Santa Cruz Atoyac, C.P. 03310, Alcaldía Benito Juárez, Ciudad de México, con horario de atención de 9:00 a 15:00 horas.
También se puede establecer contacto mediante el teléfono 5591833700 EXT 18112 o a través de las plataformas de redes sociales.
Recuerda que, aunque la caída de un ascensor es un evento altamente improbable, mantener la calma, seguir el protocolo de seguridad recomendado y la planificación son elementos clave para enfrentarlo.