Cuando la Generación Z derribó vallas y desbordó operativo en Palacio Nacional

16 noviembre, 2025
La marcha juvenil, identificada como la “Marcha del Sombrero”, logró rebasar las vallas instaladas en Palacio Nacional, dejando a los elementos de seguridad sin capacidad de contención. La abuela de Carlos Manzo encabezó la movilización.

latinus.us

Una abuelita en sillas de ruedas, con una pancarta con la imagen de Carlos Manzo entre las manos, abrió el contingente de la marca que este sábado recorrió las calles de la Ciudad de México.  

La protesta de la “Generación Z y Movimiento del Sombrero inició en el Ángel de la Independencia hacía la plancha del zócalo donde por primera vez los manifestantes lograron derribar las vallas que protegían el Palacio Nacional.

Al rebasar las barreras, la policía perdió el control por completo del operativo. Los agentes fueron superados en números y sin capacidad de contener la multitud.

Los manifestantes, no identificados como integrantes del Bloque Negro, porque se han dejado grabar y entrevistar a diferencia de otras movilizaciones, lograron derribar las vallas de metal colocadas hace unos días en Palacio Nacional

Los protestantes utilizaron distintos objetos, como corta candados, pinzas y equipo para romper las uniones entre las láminas de metal. Algunos, también usaron pinzar y equipo de esmeril.

El muro de vallas no resistió lo que originó el despliegue de los policías. La primera valla que fue quitada fue arrastrada por los manifestantes a avenida Pino Suárez, lo que abrió una brecha entre policías y las personas para iniciar un primer enfrentamiento.

Tras romperse la línea, los manifestantes y policías comenzaron a arrojar objetos, entre ellos piedras., lo que hasta el momento ha originado personas heridas, entre ellas una mujer de la Secretaría de Seguridad de la Ciudad de México.

Las personas lesionadas salieron del Zócalo para ser atendidas por equipos médicos que se encuentran en la zona. La mujer de la policía lesionada también fue atendida.

Algunas personas que participaron en la movilización consideran lamentable los hechos porque “empañan el movimiento”.

Las personas entrevistadas mencionaron que las “vallas que colocó el gobierno incitaron a la violencia”.

Agarraron parejo

Como nunca antes se había registrado en alguna manifestación pública en la Ciudad de México, los oficiales empezaron a empujar a la gente afuera del Zócalo.

“Vayan a grabar su pinche video allá”, gritaba un policía a transeúntes y periodistas que documentaban los atropellos.

Quien se oponía y reclamaba a los oficiales era agredido, empujado, y si lo llegaban a grabar les quitaban los teléfonos. Ya no se los regresaban, los aventaban o bien los tiraban al piso y empezaban a golpearlos. 

Es el caso de un joven, quien por razones de seguridad omite su nombre. Cuenta que vio cómo le quitaban un megáfono a una chica y aventaron a su mamá. El joven trató de defenderlas y terminó en el piso con ocho policías pateándolo.

“Yo estaba grabando, lo hacía desde lejos y vi cuando a una chica le quitaron el micrófono y los policías la atacaron. La madre intentó ayudarla y como a la madre la empujaron, yo me metí para quitarle a los policías el megáfono.

En cuanto los policías vieron que yo les quité el megáfono, me golpearon, me tiraron al piso y entre ocho me patearon”, platicó este joven en entrevista, mientras se limpiaba la sangre que escurría de su cabeza y su ojo hinchado.

Otro adulto mayor relata cómo vio que otros jóvenes fueron agredidos solo por observar la manifestación.

“Los jóvenes estaban sentados platicando y llegaron los granaderos y los patearon y golpearon, 20 contra ellos”.

Un vendedor de aguas embotelladas los policías le quitaron todos sus productos y no se los pagaron. El joven intentó convencer al jefe de ese grupo para que les pagaran pero lo regresaron con el resto de la gente.

En el mismo tono golpearon a dos fotoperiodistas, uno de ellos de un periódico afín al régimen le robaron todo su equipo fotográfico.
Las historias se contaron una tras otra, por lo menos una decena de personas sentadas en la calle buscaban de tener la sangre que escurría de la cabeza, otros buscaban sus maletas o sus teléfonos.

Algunos de los jóvenes fueron detenidos y llevados hasta la calle de moneda donde ya no se pudo identificar Si fueron trasladados algún ministerio público o se quedaron en la zona.

Los policías no escuchaban razones y seguían empujando a la gente fuera de la plaza de la constitución.

Algunos jovencitos también fueron golpeados solamente por grabar cómo golpeaban a otras personas.

Pese a la violencia policiaca, otras decenas de manifestantes no bajaron la guardia y continuaron con sus manifestaciones.
“¡México, México! ¡Viva Manzo!”, “ustedes lo mataron”, lanzaban las consignas los manifestantes.

Hasta las 6 de la tarde los manifestantes continuaban en algunas calles confrontando a los policías solamente con gritos y denuncias.  Los policías solo permanecieron cerrando las calles para que nadie más se volviera a acercar a Palacio Nacional por ninguna vía. Sobre la calle de Madero aún se escuchan detonaciones de las bombas lacrimógenas que están utilizando los policías para dispersar a los manifestantes.

Pronóstico del tiempo

¡No te lo pierdas!

Jóvenes irresponsables en motocicletas

Al parecer los operativos de la subdirección de tránsito no

Sentenciado a 20 años por violar a su hija en Bahía de Banderas

El aberrante hecho ocurrió en San José del Valle *La