Corcholatas, colillas y chicles por doquier

La gente no entiende que deben depositarse en los botes de basura

Falta educación y cultura.

En banquetas y espacios públicos en el municipio de Puerto Vallarta, mucha gente tira basura de todo tipo.
Destacando primordialmente las corcholatas, las colillas de cigarro y los chicles.

No entendiendo que habiendo botes de basura cerca, la gente opta por ensuciar los espacios abiertos.

Esta mañana ciudadana cibernauta envió a #NoticiasPv, #NoticiasPVNayarit y #NoticiasPuertoVallarta, imágenes en donde se observa tiradero de corcholatas sobre espacio abierto en inmediaciones de la unidad deportiva municipal, Agustín Flores Contreras.

Pidió que el material sea viral en las redes sociales, para que exista conciencia entre las personas, a efecto de no ensucien el destino y también para que las autoridades tomen cartas en el asunto.

Cabe destacar que es de suma importancia que las personas tomen conciencia y eviten arrojar desperdicios como latas de bebidas, colillas de cigarro y chicles en las banquetas.

Este tipo de comportamiento incívico no solo resulta antiestético, sino que también afecta negativamente el entorno y la imagen de la comunidad.

Cuando las personas tiran basura en las banquetas, se genera una acumulación de residuos que puede entorpecer el paso de peatones y afectar la calidad visual de la zona.

Además, este tipo de desperdicios puede obstruir las alcantarillas y sistemas de drenaje, lo que puede dar lugar a inundaciones y problemas de salubridad.

La presencia de colillas de cigarro en las banquetas puede resultar peligrosa, ya que son potenciales fuentes de incendios.

Además, a medida que las colillas se descomponen, liberan toxinas y contaminantes que pueden dañar el medio ambiente y poner en riesgo la salud de las personas.

Los chicles tirados en las banquetas también representan un problema, ya que resultan difíciles de remover y pueden adherirse a los zapatos de los transeúntes, causando molestias y ensuciando el suelo en otros lugares.

Además, su eliminación requiere de esfuerzos y recursos adicionales por parte de las autoridades municipales.

Por tanto, es importante promover prácticas responsables y fomentar una cultura de respeto hacia el entorno.

Cada persona debe asumir la responsabilidad de desechar adecuadamente sus desperdicios, utilizando los contenedores habilitados para ello.

Además, es necesario concienciar a la población sobre las consecuencias negativas de arrojar basura en las banquetas y resaltar la importancia de mantener limpio y ordenado nuestro entorno común.

En conclusión, es fundamental que las personas eviten arrojar desperdicios como latas de bebidas, colillas de cigarro y chicles en las banquetas.

Este tipo de acciones incívicas afectan negativamente la estética del entorno urbano, pueden causar problemas de salubridad y representan un costo adicional para las autoridades encargadas de la limpieza.

Promover una cultura de respeto y cuidado hacia el entorno es responsabilidad de todos.

                                                         
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