Tras chocar con un cerco en enero pasado, la cónsul mexicana en Fresno fue citada por conducir con un 0,14% de alcohol en la sangre. La diplomática, miembro del PAN (Partido Acción Nacional), debió pagar una multa, cumplir con servicio comunitario, y no podrá manejar durante tres años.
univision.com
FRESNO, California.- La cónsul titular de México en Fresno, Adriana González Carrillo, debió rendir cuentas a la justicia luego de ser citada por conducir bajo los efectos del alcohol, DUI, la noche del 17 de enero pasado. La ex diputada se halla en libertad condicional hasta el 2024, y no podrá manejar durante todo este tiempo.
De acuerdo al reporte de la Policía de Fresno número 21003170, González Carrillo chocó contra una cerca en la cuadra 9300 de la avenida Blackstone, arteria principal de la ciudad donde se desempeña como ministra titular del gobierno mexicano.
El accidente de tránsito ocurrió a las 11pm del 17 de enero, y según consta en los documentos de la corte, la diplomática y miembro del PAN (Partido de Acción Nacional), recibió una infracción por manejar con un 0.14% de alcohol en la sangre, y una citación a la Corte.
Adriana González reconoció el incidente, admitió el error y pidió disculpas. Mediante un comunicado de prensa, la cónsul indicó: «Cometí un error y me disculpo por ello. En todo momento colaboré con las autoridades, asumí toda la responsabilidad sin inmunidad diplomática», ya que según ella ante la justicia no debe haber diferencias.
El vocero de la Policía de Fresno, Felipe Uribe, afirmó que «los oficiales concluyeron que González estaba bajo los efectos del alcohol mientras conducía, y finalmente fue liberada con una citación de DUI, y la promesa de comparecer ante el tribunal».
La aludida aseguró haber cumplido con cada una de las sanciones que la corte le impuso. «He pagado las multas con recursos propios, atiendo las clases para primeros infractores y concluí mi trabajo comunitario de 88 horas en el albergue “Poverello House”.
González Carrillo preparó y sirvió alimentos a personas sin hogar durante 11 jornadas de 8 horas. «Lamento profundamente lo ocurrido, aprendí la lección y el trabajo comunitario me ha servido para el enriquecimiento de mi calidad humana», sostuvo arrepentida.
