El Año Nuevo Lunar es la fiesta anual más importante en China. Cada año recibe el nombre de uno de los 12 signos del zodiaco chino en un ciclo que se repite y este 2023 correspondió al Año del Conejo. En los tres años anteriores, las celebraciones tuvieron un carácter apagado debido a la pandemia.
BEIJING (AP) — China recibió el domingo el Año Nuevo Lunar con grandes reuniones familiares y visitas multitudinarias a templos después de que el gobierno levantara su estricta política de “COVID-0”, en la celebración más festiva desde el inicio de la pandemia hace tres años.
El Año Nuevo Lunar es la fiesta anual más importante en China. Cada año recibe el nombre de uno de los 12 signos del zodiaco chino en un ciclo que se repite y este 2023 correspondió al Año del Conejo. En los tres años anteriores, las celebraciones tuvieron un carácter apagado debido a la pandemia.
Debido a la disminución de la mayoría de las restricciones por el COVID-19, mucha gente al fin pudo regresar por primera vez a sus localidades para reunirse con sus familias sin preocuparse de los inconvenientes de las cuarentenas, los posibles confinamientos y la suspensión de los viajes.
También han regresado las grandes celebraciones públicas para lo que se conoce como el Festival de Primavera en China, en cuya capital se efectúan miles de eventos culturales a una escala mayor que hace un año.
La enorme movilización de personas podría causar una propagación del virus en ciertas zonas, dijo Wu Zunyou, el principal epidemiólogo en el Centro para el Control de Enfermedades de China.
Sin embargo, es improbable un nuevo brote de COVID-19 a gran escala para los próximos dos o tres meses porque 80% de los 1.400 millones de habitantes del país se infectaron durante la ola más reciente, dijo Wu el sábado en la plataforma digital Weibo.
En Beijing, muchos devotos oraron durante la mañana en el Temlplo Lama, aunque las multitudes parecían menores a la época previa a la pandemia.
El lugar budista tibetano permite la entrada de hasta de 60.000 visitantes al día por motivos de seguridad y hay que reservar un lugar por adelantado.
En el parque Taoranting no había indicios de los habitualmente bulliciosos puestos de comida de Año Nuevo a pesar de que las aceras estaban decoradas con las tradicionales linternas chinas.
Una frecuentada feria cerca de un templo en el parque Badachu se reanudará esta semana, pero no se sabe aún si también habrá eventos similares en el parque Ditan y el parque del lago Longtan.
En Hong Kong, las personas se congregaron en el templo taoísta más grande de la ciudad, el Wong Tai Sin, para encender sus primeras varitas de incienso del año. El popular ritual en el lugar fue suspendido los últimos dos años debido a la pandemia.