Robles en audiencia: “¿Soy el trofeo para exhibir un supuesto combate a la corrupción?”

proceso.com.mx

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Rosario Robles Berlanga, titular de las secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) y Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en la pasada administración federal, compareció esta mañana en una audiencia de apelación ante magistrados del Tercer Tribunal Unitario en Materia Penal de la Ciudad de México.

Ahí cuestionó: “¿Soy el trofeo para exhibir un supuesto combate a la corrupción, por cierto, corrompiendo las leyes? ¿Es porque soy mujer?”, reprochó.

El encuentro se llevó a cabo en el Centro de Justicia Penal Federal ubicado en el reclusorio femenil de Santa Martha Acatitla, donde permanece aprisionada desde agosto pasado por instrucción del juez de control Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, quien le impuso medidas cautelares por el “riesgo elevado de fuga”.

“Se me acusa de ser omisa ante actos de terceros, lo paradójico es que esos terceros están en libertad como dicta el debido proceso y yo soy la única que está en la cárcel. O, cuando se habla de terceros, ¿a quiénes se refiere? ¿A un gobierno o a un sexenio?”, preguntó en referencia a los alegatos que la vinculan a la “omisión” de denunciar presuntos desvíos por parte de sus subalternos.

Robles cuestionó el hecho de que se le haya dictado esa medida cautelar y se les esté juzgando, no por el hecho que se les atribuye, “sino por quien soy, por lo que represento como parte del equipo de anterior gobierno”, añadió.

Defensa solicita prórroga

En tanto, su defensa legal encabezada por los abogados Epigmenio Mendieta y Julio Hernández Barros solicitaron una prórroga a esta etapa de la investigación complementaria que concluirá este 13 de diciembre.

Sin embargo, se le concedieron dos meses más para continuar su curso. Es decir, concluirá el próximo 13 de febrero, tiempo en el que Robles seguirá en prisión.

Por su parte, la magistrada Isabel Porras resolverá a más tardar en tres días si confirma o modifica la medida cautelar.

Ante ella, Robles Berlanga continúo con su defensa:

“Yo lo resumo fácilmente: el juez Delgadillo Padierna ya había tomado una decisión antes de sentarse frente a mí por primera vez.  No le importó imponer su interés personal, aunque esto significara violentar los principios constitucionales”, alegó.

Durante estos meses la defensa de Robles ha cuestionado las pruebas que presentó la FGR para que el juez de control Delgadillo Padierna dictara medidas preventivas en su contra. Entre ellas una supuesta licencia de conducir que comprobaría la duplicidad de su domicilio, así como boletos de avión con destino a Costa Rica y la influencia que ejercería para corromper a sus antiguos subalternos.

                                                         
Compartir